Se caracteriza por:

• Tendencia hacia el naturalismo.

• Mayor realismo de gestos y movimientos.

• Disminución de la rigidez, las figuras no son tan hieráticas como en el románico.

• Suividad de los pliegues.

• Comunicación entre las figuras.

• Rasgos del rostro afilados.

• Humanización de los personajes sagrados.

Mediante el concepto naturalista de la escultura gótica se pretende representar el mundo visible tal y como es. Se representa la naturaleza, y por tanto desaparece el anhelo simbólico (excepto en arquitectura).